FILOSOFÍA
Juntas… aún difuntas es un proyecto que por sí mismo se muestra como una ofrenda, ya que conjunta el trabajo realizado sólamente por mujeres, lo que bien podría llevar a un misógino a la tumba, pero también es, en otro sentido Festiva, porque nos reúne en vida con la intención de explorar nuestra condición natural generadora, en un rito de trabajo que nos hermana con la muerte.
Al invitar a nuestros muertos a visitarnos, rescatamos de ellos sus virtudes y lo positivo de sus vivencias, en la reinvención y compromiso con uno mismo; más esta sensación de pertenencia construye entonces un diálogo plural con lo que permanece y, afirma, su ineludible encuentro con la vida y/o con la muerte.
Vivimos la libertad de tomar de nuestra tradición, aquéllos elementos con los que nos sentimos identificadas, desde donde reinstalamos un espacio ritual que vuelve a dar sentido a los elementos representados con la sal, el agua, el copal, las flores y las velas, ya que la tumba es de pronto el mejor registro de la existencia del hombre, pero justo ese lugar es también un nexo y un recordatorio.
En un tiempo de identidads el único rescate posible es la diversidad, que nos desafía a encontrar nuevas configuraciones a partir de la aproximación a una realidad concreta, rica, variable y contradictoria que se presenta en la conciencia humana, sin embargo la nuestra, es en todos sentidos, una actitud discriminatoria a cualquier imposición.
El momento para morir ha sido siempre el de todos el más breve. Un suspiro y ya está... me recuerda la imagen de una vela que se ha apagado sin necesidad que nadie la sople.

Ésta es nuestra particular visión de la muerte…